Apagón... [Quest]

La noche ya había caído sobre la ciudad, ahora por lo menos sabía que se llamaba Byakko, aunque ya era de noche, hacía horas que estaba jugando a ese juego y no podía desconectarme, comenzaba a preocuparme por mi salud mental, debería dormir en algún momento del juego, aunque también sentía como los ojos se me cerraban, ya la noche había caído por toda la ciudad y se notaba dramáticamente como las criaturas iban ocultándose en esas chozas de arcilla, Labramon y yo hicimos lo mismo, realmente parecía todo tan real, la suavidad de las colchas, la tranquilidad y el silencio nocturno. Lentamente comencé a escuchar los ronquidos de Labramon mientras yo miraba por la ventana contemplando la oscuridad... Aunque pronto lo que obviamente iba a pasar ocurriría...


Los fusibles de al parecer todo el hotel habían explotado, rápidamente nos alertó a todos. (31)

Labramon rápidamente se despertó alterado con sus cabellos erizados gruñendo, cual perro se tratase, a fin de cuentas mucha diferencia con los animales reales en sus instintos no parecían tener. Miré rápidamente por la ventana acompañado de Labramon para observar que no solo el Hotel se había quedado sin luz, sino que la ciudad entera, sin embargo en la lejanía, entre todos esos montículos de arcilla con ventanas y puertas talladas los cuales ellos llamaban hospedajes se alcanzaba a ver una penetrante luz que al parecer se encontraba aumentando repentinamente para luego apagarse, luego de eso volvía a prenderse... Al parecer la fuente de energía de la ciudad tenía desperfectos. Labramon mencionó de ir y yo acepté cual Quest común en los RPG se tratase. (32)

Nuestro objetivo se situaba ahora en las lejanías de la ciudad arenosa, en realidad al mismo lugar que fuimos durante todo el día, el puto Noise Desert, el Digimon del Hotel finalmente me había entregado su nombre, por lo menos ahora iba conociendo más la geografía que nos iba rodeando, y a juzgar por el nombre de la ciudad esta especie de mundo virtual se dividía en sectores, y me encontraba en el sector Oeste, ahora mi pregunta era dónde comenzaban el resto de los sectores... Bueno, acababa de comenzar a jugar a ese juego hace unas cuantas horas, no podía tomar todo tan aprisa, por ahora debería solucionar la crisis energética, luego descansar de alguna manera... Aunque al momento de llegar a la planta de electricidad vaya sorpresa que nos encontramos... Se trataba de un Digimon que se estaba comiendo la electricidad. (33)

Al parecer el Digimon eléctrico se trataba de una especie de escarabajo hambriento en su sed de vatios, sus tenazas en su cabeza liberaban bastante energía que parecía tener almacenada sin sentido, ese glotón ya había devorado por completo la electricidad del lugar, al parecer deberíamos detenerlo, pero cómo? la única solución que se me ocurría era hacerlo gastar toda la electricidad que consumió, aunque realmente desconocía como funcionaban las leyes de la física en ese videojuego. Labramón se me adelantó atacando con una especie de Ladrido potente a distancia que hizo efecto volteándolo, sin embargo resultó una mala idea, nos devolvió un rayo con el doble de potencia. (34)

El rayo nos había dejado como pavos al horno, realmente sentí como la electricidad recorría mi cuerpo de cabeza hasta los pies, sentía como mi piel ardía y mi sangre se secaba por tan solo un instante, hasta perdí mi aliento por tal sensación macabra, realmente el diseñador de este juego era realmente todo un maestro de las torturas, por su lado Labramon rápidamente se recuperó, tenía varios cabellos dañados, sin embargo este se encontraba decidido, al parecer otra idea rápidamente cruzó por su cabeza para derrotar a ese insecto eléctrico. Corrió hacia este a gran velocidad, pero sin detenerse este continuó directo hacia la central eléctrica parándose en un transformador bastante grande. Una vez allí intentó burlar a ese Insecto, este fácilmente cayó en su trampa lanzando un rayo, aunque este no surtió efecto, pareció desvanecerse en el aire... Eran los transformadores que estaban absorbiendo nuevamente la energía enviada. Aunque el pequeñín no se había percatado, continuó lanzando rayos hasta caer debilitado... Luego de eso fue presa fácil. (35)